Un blog para encontrar y esperar.

lunes, 2 de julio de 2007

Sólo estamos ahí, en el silencio

Las palabras por fin dicen algo cuando se ven ridículas. Es apenas expresable lo que uno descubre cuando esas voces usadas acostumbradamente, pierden su fuerza enmascaradora. Vemos, de algún modo, que no somos la historia que contamos a diario, sino la historia que nunca hemos narrado. No es aquella que uno esconde, sino la que no se sabe. Sin embargo, quizá sólo lleguemos a ella tras haber hablado día y noche de uno mismo… Entonces llega el momento ciego, el quiebre de la trama, y nuestra verdad. Ahí la narración no puede continuar. Las palabras habían estado cortadas y adecuadas para llenar un espacio que ahora no les queda. Ahí estamos, tristes, queriendo explicarnos. Y de repente advertimos que no hay nombre para lo que sentimos, no hay culpa ni pecado, no hay mancha que esconder o señalar. Ahí estamos nosotros; único cada quién y sin nombre. Nuestra verdad resulta ser silencio.
El sonido de los dedos en la piel dice más que las explicaciones; el suave toque siempre será más claro que el diálogo. El ruido del “no” no viene de la palabra. La muerte, el alejarse, en fin, el “no” del cuerpo seguirá siendo el más vivo. Nuestra verdad es equívoca, tan equivoca como una caricia, como un apretón. Frente a esa significación silente, las palabras pierden fuerza todo el tiempo, se secan. Al contrario, la ambigüedad del presente corporal se mantiene en constante elocuencia.

3 comentarios:

Guillermo dijo...

Los silencios son un mundo fascinante, encierran una comunicación inherente con el que lo habita. Mediante el silencio, lo que no se dice, lo que no se puede expresar, los movimientos, las miradas, y el todo, tienen un significante distinto, tal vez honesto. Saludos.

Rafa dijo...

Las palabras describen y limitan el mundo interno. Loque se dice es tan solo una diminuta parte de lo que se siente y piensa. Nos hemos acostumbrado a las palabras, a limitar la comunicación. Son una ayuda, es cierto aunque incompleta. Que mejor estar frente a los otros para comunicarnos con todo aquello que en el silencio habita.

Rafa dijo...

Me gustó tanto este post que escribí algo sobre el tema... ¡saludos!

Yves Klein

Yves Klein
Para quienes han usado el "Moment mal!"